El incremento en la tarifa del transporte público en Puebla será un tema crucial para la próxima administración, encabezada por Alejandro Armenta Mier, quien tomará posesión en diciembre. El actual gobernador, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, confirmó que Armenta ya tiene una estrategia definida sobre el aumento de la tarifa, aunque evitó proporcionar detalles específicos al respecto.
La declaración de Céspedes Peregrina se produjo después de una manifestación de concesionarios del transporte público el pasado lunes frente a Casa Aguayo. Estos transportistas, frustrados por el aumento de costos operativos, solicitaron que el pasaje suba a 19 pesos, lo que representaría más del doble de la tarifa actual de 8.50 pesos. Este incremento ha sido motivo de debate y es una demanda recurrente de los concesionarios, quienes argumentan que desde el último ajuste en 2019, los costos de combustibles y mantenimiento han subido significativamente, impactando su rentabilidad.
Omar Álvarez Arronte, titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte, indicó que la administración entrante podría utilizar un fondo de hasta 350 millones de pesos gestionado a través de Nacional Financiera (Nafin) para financiar mejoras en el servicio. Dicho fondo, gestionado hace dos años, sería clave para modernizar la flota de transporte público.
Las rutas con mayores quejas por parte de los usuarios incluyen la Ruta 4, Ruta 10, Ruta 21, Ruta 3, Ruta 76, Ruta 33, Ruta 11, Ruta 25, Ruta 50 y Loma Bella. Entre las principales denuncias se encuentran el mal estado de las unidades y la falta de seguridad en los vehículos, que no cuentan con las tecnologías prometidas como los botones de pánico o las cámaras de vigilancia.