Aún sin iniciar formalmente su periodo como dirigente estatal del PAN en Puebla, Mario Riestra Piña ya enfrenta deserciones y señales de descontento dentro del partido. Uno de los panistas que públicamente respaldaron su fórmula con Genoveva Huerta no continuará en el proyecto. La razón: promesas incumplidas que se hicieron a varios militantes para sumar apoyos durante la campaña interna.
El proceso de transición entre la dirigencia saliente, encabezada por Augusta Díaz de Rivera, y la entrante comenzará el lunes 6 de enero. Este protocolo es parte de los estatutos del partido y se activó tras una prórroga solicitada por la actual administración. Una vez completado, Mario Riestra y Genoveva Huerta tomarán protesta formal como presidente y secretaria general para un periodo de tres años.
El 15 de diciembre de 2024, Mario Riestra obtuvo el respaldo de 70 de los 113 consejeros estatales del PAN, equivalente al 61% de los votos en una asamblea celebrada en un hotel privado de la capital. La Comisión Nacional de Procesos Electorales del PAN ratificó este triunfo, mientras que el Tribunal Electoral del Estado desechó las impugnaciones presentadas por Felipe Velázquez.
El morenovallismo consolidó su control sobre el Yunquismo con este resultado, pero la falta de unidad se evidencia con las recientes deserciones. Mario Riestra enfrenta el desafío de reconectar con las bases del partido, reforzar su papel como oposición responsable y recuperar la imagen del PAN como una fuerza política ganadora en Puebla.
