La renuncia de Gilberto Higuera Bernal como titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla marcó un hito político y administrativo en el estado. Este viernes 13 de diciembre, Higuera formalizó su salida tras haber comparecido ante el Congreso local el pasado 12 de diciembre.
Aunque Higuera justificó su decisión argumentando que buscará una de las vacantes en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), las circunstancias apuntan a que su salida se alinea con el inicio de la administración de Alejandro Armenta Mier, quien asumirá la gubernatura el próximo 14 de diciembre.
Fue el fiscal durante 6 años con 5 gobernadores distintos: Tony Gali Fayad, Martha Erika Alonso, Guillermo Pacheco Pulido, Miguel Barbosa Huerta y finalmente Sergio Salomón Céspedes Peregrina. Tomó el cargo desde septiembre de 2018 después de que Víctor Carrancá solicitara licencia indefinida.
En rueda de prensa, Céspedes Peregrina reconoció la labor de Higuera calificándolo como un “gran funcionario” y destacando su papel en la toma de decisiones complejas para Puebla.
Entre las críticas a la gestión de Higuera se señalaron el rezago en investigaciones judiciales y denuncias de abuso de poder por parte de personal ministerial. Un caso muy mediático que queda tal cual lo recibió, fue el de desaparición y feminicidio de Paulina Camargo.
Sin embargo, su salida representa un parteaguas para el sistema de justicia en Puebla, que ahora se encuentra a la espera del proceso inédito de elección de jueces y magistrados a través del voto popular, donde pro supuesto participará.
