Rechazan la injerencia del CEN. Visión pesimista sobre el 2021. Revelaciones de Montiel.
Se está abriendo una brecha entre Alejandro Moreno Cárdenas y los gobernadores del PRI. El dirigente nacional tiene su foco en la campaña por San Lázaro y quiere controlar las candidaturas del tricolor a la Cámara. Una afronta directa a los gobernadores que reclaman para sí esos espacios.
Es entendible: el PRI es el partido que más gubernaturas pone en juego y los mandatarios estatales saben que será muy difícil retener el poder. En ese sentido, San Lázaro y algunas alcaldías se consolidan como el salvoconducto para una salida del poder ordenada. Posiciones donde los gobernadores pueden ubicar a sus personas de confianza.
Según pudo conocer LPO, se están multiplicando los cruces con mandatarios como Claudia Pavlovich (que ni siquiera va a las reuniones que Alito convoca), Quirino Ordáz, Omar Fayad y Alejandro Tello. El dirigente en tanto sigue teniendo en Alfredo Del Mazo a su principal sostén.
Entre los gobernadores críticos circula la idea de que en realidad Moreno Cárdenas acordó, a través del gobernador de Oaxaca Alejandro Murat (de los favoritos de Andrés Manuel López Obrador) y Julio Scherer, hacer una elección más bien mediocre en San Lázaro para así asegurar la hegemonía de Morena.
Hace algunos días en una reunión para pocos Arturo Montiel, ex gobernador mexiquense, contó que Alito le habría dicho que su meta era tener 50 escaños en San Lázaro en 2021. Actualmente son 47.
La realidad es que en la segunda mitad de mandato ya no sería tan redituable tener una bancada pequeña para ser el “fiel de la balanza”: todas las grandes reformas que la 4T quería ya son una realidad. La segunda mitad de mandato será de corte más bien administrativo.
El rompecabezas de estas especulaciones se completa con los suculentos contratos que ha estado recibiendo la firma campechana Marinsa en Pemex. Desde siempre sobrevuela la tesis de que Alito tiene un rol protagónico en esa empresa.
Cerca de Moreno Cárdenas rechazan estos argumentos y señalan que el dirigente ha sido muy crítico con el Gobierno en los últimos meses, especialmente por el manejo de la pandemia.