En lo que parece más un ejercicio de vanidad que de gratitud, la todavía presidenta municipal de San Martín Texmelucan, Norma Layón, se encuentra en su “gira del adiós”. Agradecimientos a los ciudadanos, en teoría, pero en práctica es un tour pagado por las arcas del ayuntamiento de Texmelucan para cerrar negocios, afianzar acuerdos y conseguir los respaldos necesarios para intentar colarse en el equipo del futuro gobernador de Puebla, Alejandro Armenta.
Layón, quien fracasó en todos sus intentos por convertirse en candidata de Morena a la gubernatura, al Senado y a una diputación federal, no se desanima. Su intensa campaña en TikTok, aunque viral en un par de ocasiones, no logró catapultarla. Su despliegue publicitario con espectaculares y pintas de bardas en diversos municipios, así como su inclusión en encuestas de preferencia electoral, no fueron suficientes. Al final, sus aspiraciones fueron truncadas con promesas de espacios para ella o sus allegados, dejando a su pupilo favorito, Jaime Aurioles, como posible beneficiario.
Ahora, en sus últimos días de gestión, Layón no pierde el tiempo. Está decidida a ofrecer su perfil y su cartera de aliados al servicio de Armenta, utilizando su gira de despedida para concretar estos apoyos.
