Bien dicen algunos que lo que nos falla a los mexicanos es la memoria, la tenemos bien cortita. En política ese pequeño pecado colectivo ha sido el caldo de cultivo de muchos repulsivos retoños que por más que se digan “nueva escuela”, lo cierto es que de nuevo tienen lo que Chabelo de niño. Esta afirmación de desilusión es a razón de la investigación de Mexicanos Contra la Corrupción hizo donde se recuerda, porque esto ya se había dado a conocer desde el año 2018, que MORENA se financió por medio de los recursos provenientes del fideicomiso “Por los demás” creado por el mismo partido supuestamente con el objetivo de apoyar a los damnificados del sismo del 19 de septiembre de 2017, pero cuyos recursos fueron usados con otros fines por medio de una “operación carrusel” que requirió de la participación de varios personajes que no se sabe si solo por este o por más méritos, merecieron la recompensa de tener un cargo en distintas dependencias del gobierno.
Tal es el caso de Cesar Addi Sánchez Salinas, joven que inició humildemente como supuesto estudiante antisistema en la máxima casa de estudios poblana, al principio se sintió más cómodo en el porrismo buapachoso y luego se fue a lo más finolis dentro de la célebre cuatroTe poblana, donde se ganó la confianza de Rodrígo Abdala, quien fue delegado de la Secretaria del Bienestar y supo recompensarlo con un puesto de subdelegado regional del Bienestar.
Pero como a todo novato, en esta travesía por el poder, se subió a un ladrillo y se mareó. Es cierto que no es un sujeto desconocido para la prensa poblana, pues algunos medios le han dedicado sendas notas donde dan cuenta de su amor por el dinero donado por sus camaradas menos afortunados, pues quienes han tenido la mala fortuna de estar bajo su mando aseguran que les exige “donaciones” eso sí, por debajo del agua, de sus respectivos salarios, argumentando que tales recursos se usan para la “causa” del cambio verdadero, aunque si me preguntan a mi yo más bien creo que es para el cambio verdadero de la condición económica del susodicho.
No sé, considérenme idealista, pero es que no puedo concebir que el partido que se dice “diferente” consienta a semejante personaje y lo siga recompensando a pesar de todo lo que sus subordinados aseguran que le tienen que aguantar. Porque del dinero al menos asegura, tiene un destino noble, pero ¿Qué hay de las pobres almas que siendo siervos de la nación se han vuelto siervos del César de la Margarita? Porque el sujeto los tuvo a su disposición como sus esclavos; ayudantes de mudanzas gratuitos y otras tantas tareítas. Y los que haciendo uso de sus redes sociales “privadas” tienen que pasar su visto bueno para poder hacer publicaciones y de las mujeres ni hablamos porque es un misógino a todas luces, acosando a subordinadas y expresando la frustración sexual de las que se atreven a revelarse a sus tonterías.
En cuanto a lo de la Operación Carrusel, Cesar Addi tuvo el encargo de cobrar y volver a depositar la nada despreciable cantidad de tres millones quinientos setenta y seis mil ochocientos pesos. Pero no importa, ningún dinero será suficiente para luchar por el “cambio
verdadero”, aunque este solo sea él de sus bolsillos, lo que si no tiene perdón es que sea tan gandalla con su gente, si bien es cierto y seguramente porque su gandallismo ya era insoportable, el César de la Margarita ya no se encuentra en Bienestar, ahora está en MORENA Puebla haciendo lo que sabe hacer molestar a los de abajo arrastrase con los de arriba, sin embargo su mala fama lo persigue porque en los eventos realizados por el partido en los distritos federales de la capital los militantes lo increparon por falta de pagos a RC en la pasada elección que sobra decir estaba a su cargo junto con su equipo de Bienestar y por tratar mal a la gente, no se puede pensar que en el partido no saben la clase de persona que es porque se los dice la propia militancia, lo que al parecer solo demuestra que en MORENA Puebla todo está echado a perder.