¿Es posible reprogramar el subconsciente?

Por: Admin

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La clave de la comunicación efectiva está en el subconsciente, asegura Ricardo Eiriz, autor del libro Comunica con Éxito (Sirio).

Creador de una metodología terapéutica para superar bloqueos y traumas emocionales y reprogramar creencias el Método Integra, el escritor español asegura en entrevista que cada persona tiene el potencial de expresarse de manera fluida y siendo congruente consigo misma pero, en muchas ocasiones, lo que bloquea ese proceso son las programaciones inconscientes.

“Hay muchos caminos de llegar al subconsciente, pero el que yo enseño en Método Integra es el de entender el subconsciente y relacionarnos con él como lo que realmente es: una especie de computadora que se va programando con las experiencias que vivimos, que se programa con base a distintos tipos de memorias que vamos almacenando y que después se convierten en el origen de nuestros comportamientos”, explica.

Con la aplicación de este método, agrega, también se pueden superar fobias, adicciones, ansiedad, depresión, insomnio…

Por medio de técnicas energéticas, que permiten el acceso a nivel subconsciente, explica, se realiza la transformación para alinear la mente inconsciente con la consciente.

“A pesar de ser una gran desconocida para la mayoría de personas, nuestra mente subconsciente forma parte de nosotros y está a nuestra disposición. Todos podemos acceder a ella y programarla para generar transformaciones impactantes y duraderas”, asegura.

En el área de la comunicación, indica, podemos acceder a ese potencial interior que todos tenemos, que nos permitirá comunicarnos de manera fluida y siendo nosotros mismos para generar el mayor beneficio posible.

“Y como todos somos seres sociales que estamos en comunicación directa con tantas personas en nuestro día a día, ya sea en la familia, en el trabajo, con los amigos, etcétera, pues esa capacidad de comunicarnos la tenemos que desarrollar si realmente queremos vivir de forma plena en nuestro día a día”.

A los 41 años, en el 2009, Eiriz dio un giro a su existencia: dejó su vida como ejecutivo en Barcelona, tras experimentar una crisis existencial y decidió estudiar psicología, neurociencias, epigenética y decenas de terapias.

“Ese fue un camino para mí totalmente novedoso, pero que lo seguí por coherencia de, en un momento determinado, decidir ser feliz”, explica.

Luego de desarrollar el Método Integra, ha impartido conferencias, cursos y publicado ocho libros relacionados con sus investigaciones. También ha formado a cientos de instructores y facilitadores en su metodología. En noviembre de 2017 fue nombrado Embajador de la Paz y la Buena Voluntad, por la Unesco.

¿Qué es lo que va a encontrar el lector en este libro?
Dos cosas: la transformación interior que le permita desarrollar esa capacidad de comunicación y sentirse bien, y disfrutar y fluir en la comunicación en todo momento y, por otro lado, los conocimientos que también se llevan a nivel del subconsciente para estar alineados con esa forma de comportarse, los conocimientos de cómo debemos llevar a cabo la comunicación, porque muchas veces simplemente nos dejamos fluir, a ver cómo sale, y en cambio, lo que tenemos que hacer es tener una preparación previa para toda comunicación que vayamos a hacer: estar alineados con el mensaje que queremos transmitir al público, al colectivo o a la persona con la que queremos tener ese impacto.

¿Cuál dirías que es el objetivo más profundo de la comunicación humana?
Yo creo que generar impacto en los demás, ayudar a que los demás se puedan desarrollar al máximo, que podamos vivir en coherencia, congruencia, disfrutando plenamente de nuestras relaciones, yo creo que esa es la base de la comunicación. Es evidente que después la podemos llevar a muchos otros ámbitos, pero lo básico es generar impacto en los demás llevándoles un valor agregado.

En tu experiencia, ¿cuáles son los bloqueos más comunes que tenemos para comunicar adecuadamente?
Lo habitual son traumas o bloqueos emocionales, que mayoritariamente arrastramos desde la infancia. Experiencias en las cuales, ya sea que teníamos un padre, una madre, o ambos que nos decían que nos calláramos continuamente porque están hablando los mayores y lo que nosotros vamos a decir no es importante, que no interrumpamos. Esto nos lleva a interiorizar creencias de que lo que nosotros hacemos, decimos, pensamos, no vale la pena, que somos inferiores a los demás, que no merece la pena decir nada porque no vamos a aportar nada de valor, cuando hay otros que saben más que nosotros.
Y también hay situaciones en las que generamos traumas o bloqueos emocionales, porque nos exponemos o nos exponen en algunas situaciones a momentos en los que la pasamos mal.

¿Todos los bloqueos y traumas se pueden superar?
Todos tenemos esa capacidad de transformar nuestro subconsciente, tenemos la capacidad de reprogramar las memorias que tenemos ahí con independencia de lo duras o no duras que sean las experiencias vividas.

Vía: Reforma