El salario promedio para personas con jornada completa de trabajo es de tan solo $7,114.00 pesos mensuales, lo que nos ubica como la 4ta entidad con los salarios más bajos de todo México.
@AlbertoPacheco_
La última edición del INDICE DE COMPETITIVIDAD ESTATAL 2023, no solo expuso la terrible situación por la que atraviesa la Entidad: pobreza, precariedad salarial, escases de mano de obra cualificada y encima, un sistema político, que en nada favorece la generación de un ecosistema empresarial de calidad.
No obstante, el cinismo, también está a la altura del desastre que tenemos y es que, la secretaria Salomón, no se ha cansado de presumir logros que no se ven, empresas que no llegan y datos que no existen.
Veamos:
Puebla, es la entidad con el mayor número de universidades, pero nos ubicamos en el lugar 23 respecto al total de personas con formación profesional, con tan solo el 22% de la población económicamente activa.
El salario promedio para personas con jornada completa de trabajo es de tan solo $7,114.00 pesos mensuales, lo que nos ubica como la 4ta entidad con los salarios más bajos de todo México.
Tenemos un ecosistema empresarial de muy baja complejidad (lugar 20), tan solo el 1.5% de la población económicamente activa, ha recibido algún tipo de capacitación.
Puebla tiene una bajísima productividad, con una tasa de crecimiento negativa durante los últimos 3 años, -1.5% y contradiciendo los datos carnavalescos, de que Puebla va requeté bien.
En Inversión Extranjera, Puebla NO es la 4ta entidad con mayor captación como nos lo cuenta en simpáticos mensajes de radio, sino, la número 13 y de hecho, no se ancló ninguna inversión nueva, todo fue reinversión de capital de empresas ya asentadas en la Entidad.
Y para rematar, Puebla tampoco es una Entidad atractiva para el nearshoring, pues el IMCO, colocó a la Entidad muy por detrás de las 10 entidades más preparadas, sobresaliendo, la falta de capital humano altamente cualificado y la ausencia de un ecosistema empresarial intensivo en actividades de alto valor agregado, además, de la ausencia de una política industrial moderna y articulada.
Triste, tristísima la situación de Puebla, pero peor aún, las mentiras de una secretaria que se creyó inalcanzable…
