Que detrás de las encuestas de Enkoll y de El Heraldo de México en las que hay hasta 20 puntos de diferencia está la mano del defenestrado Julio Scherer quien no es bien visto en Palacio Nacional.
Por @eljovenzeus
El licenciado Fojaco suda frío.
No deja de leer X (antes Twitter).
Entra a los portales, espera la pinche señal que no llega. Busca las cuentas de los periodistas; indaga en la cuenta de Mario Delgado; le escribe desde su teléfono a su asesor, al licenciado Malagón:
—Entonces, ¿sí aparezco o no aparezco en la encuesta?, Malagón.
—Tranquilo, Fojaco. Tú vas a ser. Por cierto, necesitamos unos apoyos para los medios nacionales para que te suban en la encuesta.
—¿Otra vez?
—Fojaco, si quieres ser gobernador debes invertirle.
—Bueno, bueno, y ¿de a cómo va a ser?
—Los amigos me dicen que 8 millones, cuatro para un diario y cuatro para el otro.
—¿Y cuánto le van a poner de ventaja?
—50 para ti y 35 para el licenciado Bigotes, ya ves que ha crecido y…
—No, no, no. Ponle dos a uno, 50 para mi y 20 para el pinche Bigotes. Yo pago, yo mando. Y sube a otros, que lo empaten para que se le complique.
—Pero nadie lo va a creer, no han crecido como di…
—¡Nada!, ¡piso parejo! ¡Aquí hay piso parejo!
—Está bueno, pues.
—Está bueno, pues.
Más tarde aparece Malagón en la oficina de Fojaco, la secretaria de este último le da unas bolsas de Palacio de Hierro cargadas de cajas de zapatos que están llenas de billetes. Toma los paquetes baja al estacionamiento y en su camioneta separa 1 millón de los 8 que le entregaron.
“Ay, pinche Fojaco, esta es por mi comisión”, se dice así mismo Malagón, quien, al ver los paquetes de dinero, agarra otro millón de pesos y se dice “esta es la comisión para llevarle a los matraqueros de la prensa que tragan como pelados de hospicio, aunque nada más le vamos a dar 20 mil pesos a cada uno, nos quedamos con 900 mil, luego los desacostumbra uno a esos muertos de hambre”… se detiene y dice bueno, “este otro milloncito es para… para… por los gastos de representación, pos qué caray”.
Total, se quedan dos millones para repartir a los dos periódicos nacionales; el resto se lo guarda el licenciado Malagón y fiel a su estilo piensa en voz alta “ni modos (ni modo) que le hablen al pinche Lic. Fojaco y le digan que le di menos. Además, la encuesta ya la hicieron en Palacio, ni modos que no sepa. Ya ni modos. Como bien dice Menchaca: uca, uca el que lo encuentra se lo emboruca y yo me encontré a este pendejo todo nervioso, ni modos, quien le manda a que me lo encuentre así”.
Malagón le lleva sus 20 mil pesos al columnista Turrubiates:
—Turribiates, ahí te manda esto, tu amigo. Te pide que adelantes algo, que mañana saldrán unas encuestas nacionales. Se trata de frenar al Bigotes. Puro TUCOB (Todos unidos contra el bigotón).
—Oye, pero 15 mil, no habíamos quedado que eran 20 mil.
—No tenemos mucho dinero, Turrubiates.
—Con esto no sale.
—Piensa que cuando lleguemos te va a ir de poca madre.
—Siempre dicen lo mismo y cuando viene la firma de convenios me dicen que el recorte federal y sus chingaderas.
—¿Lo vas a querer o no?, Turrubiates.
—Pues ya, échalo. Le voy a decir directamente al licenciado Fojaco que voy a subir la tarifa.
—Sí, ándale, ándale, pero mira, mientras adelanta que mañana la encuesta seria.
—De una vez lo subo.
—Ya nos vamos entendiendo.
Tres trascendidos tres, para antes de una encuesta
Trascendido 1: Que detrás de las encuestas de Enkoll y de El Heraldo de México en las que hay hasta 20 puntos de diferencia está la mano del defenestrado Julio Scherer quien no es bien visto en Palacio Nacional.
Trascendido 2. Que Claudia Sheinbaum le mandó a Olivia Salomón a Mario Saucedo para que le opere la elección con “la izquierda”. Por ello, la reciente reaparición de Mario Vélez Merino, quien estrenó nuevo tinte para el cabello y fue un famosísimo protagonista en el escándalo de “Los Prócoros” y de los “melones y las sandías que quieras” en 1998. Mario Vélez fue quien operó con Mario Marín (en ese entonces presidente del PRI) y con Javier López Zavala (su particular) la inclusión de dos consejeros en la entonces Comisión Estatal Electoral para que manipularan la elección estatal a favor del partido en el gobierno.
Trascendido 3. El puente de comunicación entre Alejandro Armenta y Claudia Sheinbaum además de Julio Scherer es el experredista José Antonio Rueda alias La Polla; quien acercó al senador con ese grupo fue Horacio Gaspar Lima (QPD). Por ello, Armenta asegura que tiene una línea de comunicación con el grupo de la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México.
