Este 16 de Noviembre presentó su segundo informe legislativo Fernando Manzanilla.
El tema generó expectativas y es que el diputado es considerado por el gobernador Barbosa como su enemigo, aunque también por otros personajes, no tan menores.
Desde su salida del gobierno de MORENA en Puebla ha ocurrido un fenómeno, el diputado ha sufrido la embestida del poder desde todas sus trincheras.
Pero esa es otra historia.
Fernando Manzanilla se arropó en los colores del partido que representa, el PES.
Como lo marca la nueva normalidad el informe fue transmitido por las redes sociales.
El punto que señaló fue la pandemia y sus consecuencias; presentó testimonios de gente que ha visto afectada su economía: pérdidas de empleo, cierre de negocios, gente que entrega todo su sueldo al pago de servicios: gas, luz, internet…
Hizo de su informe un testimonio de la pandemia.
Reconoció la falta de las condiciones que se viven en los hospitales.
Exhortó a la CFE de Manuel Bartlett a urgir un programa para beneficiar a las familias.
Urgió la necesidad de voltear los ojos al sistema educativo.
Mostró testimonios de la violencia familiar. Rostros desgarradores.
Los informes de los diputados poblanos han pasado en su mayoría desapercibidos y han caído en aldeanismo político, ese que es adicto al confeti y la matraca; en donde el personaje central es el político en turno.
Fernando Manzanilla le apostó a llevar al ciudadano al centro del debate y termino ganando, pues ganó el reconocimiento de la gente y el berrinche de sus adversarios.
Los retos.
Reconoció que la vacuna tiene que ser accesible.
Habló sobre el proceso electoral que viene, elecciones que definirán el rumbo del Presidente
Consideró que el 2021 será clave para la reconciliación.
Manzanilla sigue su ruta.
Será en enero que defina qué sigue.
Por hoy no lo sabemos, quizás, ni el mismo del todo.
Mi cuenta en tuiter: @adangio