Revolución Biónica: Nueva prótesis controlada por la mente es una realidad

Por: Rocío Rios

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Avance en Prótesis Biónicas: Controladas por el Pensamiento 

En el campo de la tecnología médica, un reciente avance promete transformar la vida de quienes utilizan prótesis. Un equipo de investigación dirigido por el ingeniero biónico Max Ortiz-Catalán, de la Universidad Tecnológica de Chalmers en Suecia, ha desarrollado una prótesis de brazo innovadora que se conecta directamente al sistema nervioso del usuario, permitiéndole controlar con precisión los movimientos de los dedos solo con pensarlo.

Este avance llega en un momento en que el Cibatlón, también conocido como las Olimpiadas Cíborg, está a la vista. Fundado en 2016, el Cibatlón celebra la integración de la tecnología con el cuerpo humano mediante competiciones que van desde montar en bicicleta hasta tareas cotidianas como colgar ropa.

La nueva prótesis de Ortiz-Catalán podría ser un competidor formidable en la denominada “carrera de brazos”, una prueba que mide la habilidad para realizar tareas como colgar camisas en un tendedero.

Las prótesis convencionales suelen utilizar partes del cuerpo como los hombros o codos para su movimiento, limitando la destreza del usuario. En contraste, la prótesis desarrollada por Ortiz-Catalán y su equipo se conecta directamente a los nervios del usuario, lo que permite un control mucho más fino y natural. Este avance fue presentado en un estudio publicado en Science Translational Medicine.

La tecnología detrás de esta prótesis implica una conexión directa entre electrodos implantados en el hueso húmero y los nervios del usuario. La integración de señales nerviosas amplificadas mediante injertos musculares permite a los pacientes controlar los movimientos de la prótesis de manera intuitiva. En lugar de realizar movimientos de manera consciente, el usuario puede pensar en la acción deseada y ejecutarla casi automáticamente.

Esta técnica representa un gran paso adelante desde las prótesis mioeléctricas tradicionales, que a menudo enfrentan desafíos como la fatiga o el dolor. Paul Cederna, cirujano plástico de la Universidad de Michigan, ha trabajado en una estrategia similar que conecta nervios a músculos, pero el equipo de Ortiz-Catalán ha ampliado esta técnica para ofrecer una mejor integración y control.

La plataforma protésica aún está en desarrollo, y el equipo de Ortiz-Catalán está trabajando para añadir retroalimentación sensorial y posiblemente lograr una conexión inalámbrica en el futuro. Sin embargo, los resultados hasta ahora son prometedores. El paciente que ha usado esta prótesis durante más de dos años puede realizar movimientos complejos como abrir y cerrar la mano, rotar el brazo y mover los dedos de manera independiente.

El próximo Cibatlón en 2024 será el escenario ideal para demostrar el potencial de esta tecnología. “Ver a nuestro paciente usar la prótesis en su vida diaria y en situaciones de alta demanda física es extremadamente gratificante”, dice Ortiz-Catalán. La combinación de avances tecnológicos y el espíritu competitivo del Cibatlón podrían marcar el inicio de una nueva era en el diseño de prótesis y en la integración de la tecnología con el cuerpo humano.